1. Viajar con un perro: lo que hay que tener en cuenta
Seguro que alguna vez, tanto al realizar trayectos cortos como largos desplazamientos, te has preguntado acerca de la forma más correcta, cómoda y segura de viajar con un perro en el coche. Y es que no hay que dejar nada al libre albedrío, pues tanto tu seguridad como la del resto de conductores puede estar en peligro en un simple abrir y cerrar de ojos.
La normativa para llevar un perro en el coche es bastante específica, ya que, sin importar la duración del viaje, tu mascota siempre debe ir atada y/o en su trasportín.
Los preparativos a la hora de embarcarte en un viaje en coche con tu perro empiezan antes de arrancar el coche: tener a mano agua y comida, sus juguetes favoritos, medicamentos o remedios contra el mareo, etc., para que el trayecto resulte en el más plácido, cómodo y por ende seguro de todos.
2. ¿Cómo llevar al perro en el coche?
Incluso si se trata de un perro de tamaño pequeño, los peligros que entraña el llevar al perro en el coche sin atar son infinitos. Las estadísticas y estudios demuestran que un animal puede aumentar el extremadamente el riesgo de distracciones al volante, así como provocar accidentes de diversa índole. A la hora de emprender un viaje, el 82 % de las mascotas lo hacen en turismo, y en caso de accidente o colisión, su presencia puede convertirse en un problema importante; un perro de tamaño normal multiplica su peso en un 35 % en un accidente a tan solo 50 km/h, por lo que si el animal pesa 200 kg., su cuerpo saldría despedido como una fuerza de 700 kg. Bastante impresionante, ¿verdad?
A esto hay que sumarle el peligro que entrañan para el resto de usuarios en la carretera, ya que por supuesto puede inducir accidentes por distracción o por medio del físico del animal, por ejemplo si este se asoma por la ventanilla.
En cualquier caso, llevar al perro en el coche sin amarrar incurre en una multa de más de 100 €, a lo que hay que sumarle la posible retirada de puntos de carné si es el responsable de fracciones más graves.
3. La seguridad de los perros en el coche
Existen en el mercado diferentes formas y herramientas con las que proteger la seguridad de tu perro y la tuya:
- Arneses: son los más populares, prácticos y baratos, y además pueden adaptarse a otros ámbitos de la vida cotidiana. Son ideales para perros pequeños o de tamaño mediano que puedan ir en los asientos traseros.
- Rejilla divisoria: en caso de perros más grandes, lo ideal es que vayan en el maletero igualmente protegidos con un cinturón de seguridad para perros, pero gracias a la rejilla protectora entre el maletero y los asientos no habrá peligro de que el can se abalance contra los pasajeros.
- Trasportín: los perros pequeño también pueden ir ubicados en el maletero del vehículo bien sujetos o en el suelo entre los asientos, dentro de su trasportín. Es uno de los métodos más seguros disponibles en el mercado.
4. Cómo viajar con un perro en el coche y llegar bien a tu destino
Teniendo en cuenta estas recomendaciones y normativas sobre seguridad, también hay que poner en práctica algunas técnicas que harán que tu perro se sienta agusto y cómodo durante el trayecto.
- Hay muchos animales que se estresan en este tipo de situaciones, sobre todo si es la primera vez que la realizan. En este caso, intenta tranquilizarlo mediante caricias o entreteniéndolo con juguetes o juegos.
- Algunos animales también experimentan mareos, especialmente los más pequeños, si el trazado tiene muchas curvas especialmente. Si sospechas que tu perro puede marearse, lo ideal es consultar antes a un veterinario por si necesita medicación o algún tipo de tranquilizante.
- En relación a esto último, es conveniente no realizar cambios en la dieta de tu mascota en el mismo día del viaje o los días anteriores, ya que te arriesgas a que tu perro sufra una indigestión y vomite durante la travesía.
- Al igual que tú, tu perro también necesita descansar, estirar las piernas y mantenerse hidratado, por lo que si es un viaje largo, es aconsejable parar en zonas de descanso.
- Hay que tener especial cuidado en el verano al llevar al perro en el coche, ya que ellos no refrigeran la temperatura como nosotros y si se quedan encerrados mucho tiempo pueden sufrir un golpe de calor. Nunca los dejes solos y asegúrate de tener a mano agua fresca y de que el vehículo esté bien acondicionado.
5. ¿Viajar con mi perro? Conclusión
En definitiva, viajar en coche con un perro implica ciertos riesgos, los cuales pueden salvaguardarse si se toman las medidas de seguridad necesaria. De esta forma, llevarte a tu mejor compañero de vacaciones no te supondrá ningún problema y podrás disfrutar del trayecto con total tranquilidad.