El concepto "car sharing" surgió en Suiza hace más de 60 años y la idea fue madurando poco a poco hasta que en 1987 se creó la primera compañía que ofreció vehículos en préstamo de la misma forma que se hace hoy en día. Es fácil de entender por qué este tema sigue estando en boga, ya que es un sistema ideal por las ventajas que ofrece, permitiendo alquilar un coche por períodos de tiempo limitados al contar también con una flota bastante grande. ¿Estás pensando en vender tu coche y pasarte al "car sharing" pero aún no estás convencido de ello? Este artículo puede ayudarte a aclarar tus ideas.
1. Darte cuenta de lo mucho que usas tu coche
El uso medio de un coche en ciudad en nuestro país equivale a unas 260 horas anuales, solamente un 3% de las 8.760 horas que tiene un año. Si te paras a pensar en lo que tardas en ir al trabajo y en el tiempo que el coche está aparcado, en realidad no está siendo usado cerca del 80% del tiempo. No parece una mala idea, entonces, el venderlo para invertir el dinero en algo mejor, y con el "car sharing" tú mismo puedes ver cuánto tiempo usas el coche.
2. Olvidarte de los gastos fijos que afectan a tu bolsillo
Cada coche tiene unos costes fijos que no puedes evitar, como el seguro, los impuestos o las reparaciones. Al final estás invirtiendo mucho dinero en algo que no usas tanto. Con el "car sharing" solo pagas por lo que utilizas, por lo que cuanto antes vendas tu coche antes podrás gastar el dinero en otra cosa.
3. No pierdes tiempo buscando aparcamiento
Sabes bien lo molesto que puede ser encontrar aparcamiento, sobre todo en las grandes ciudades. Con el "car sharing", sin embargo, ya sabes de antemano el sitio en el que tienes que aparcar el coche. De esta forma no solamente ahorras combustible y contaminas menos, sino que además ahorras tiempo.
4. Evitas tener que comprar un segundo vehículo
Cuando tienes familia puede ser especialmente complicado ser flexible con solo un coche. Sin embargo con el "car sharing" eliminarás muchos gastos (mantenimiento, llenar el depósito, etc.) propios de tener dos coches para tu familia, por lo que puedes invertir el dinero en otra cosa o incluso plantearte vender uno de los coches en el caso de que tengas dos.
5. Puedes disfrutar de un coche distinto cada día
El préstamo de vehículos es una manera versátil de cambiar de coche: una furgoneta si tienes que hacer mudanza, un modelo más compacto y respetuoso con el medio ambiente para el uso diario o un descapotable si te apetece salir de viaje. Deshazte de tu coche y disfruta de la diversidad. Siempre.
Deja que estas razones para pasarte al "car sharing" calen en tu mente. Aunque decirle adiós a un coche no es una decisión fácil, hay argumentos que pueden ayudarte a dar el paso, como por ejemplo saber cuánto podrías conseguir por él. Y si te convence, solo tienes que iniciar los pasos para su venta.
