Tener un coche multiplica las posibilidades de movilidad de una persona con discapacidad, especialmente aquellas en silla de ruedas o con movilidad reducida. Hoy en día muchos fabricantes facilitan la adaptación de estos vehículos, aunque estas modificaciones no vienen de serie y por tanto hay que pagarlas aparte.
Por este motivo, es especialmente importante conocer las ventajas de comprar un coche con minusvalía, ya que casi siempre cuentan con ciertas exenciones fiscales en impuestos aplicables a la compra de un vehículo nuevo, y a menudo los propios concesionarios ofrecen descuentos específicos sobre el precio final.
Para tener acceso a estas bonificaciones hay que analizar las circunstancias personales de cada individuo (no es lo mismo comprar un coche con minusvalía del 33%, que con un grado de discapacidad inferior o con una deficiencia visual), teniendo en cuenta que solo es posible acceder a exenciones y reducciones fiscales cuando el vehículo va a destinarse exclusivamente a la persona en cuestión, independientemente de quién vaya a conducir el coche.
Hacienda no solamente se considera personas con discapacidad o minusvalía aquellas que deben desplazarse en silla de ruedas. También acceden a las bonificaciones fiscales los siguientes casos con movilidad reducida:
Otro factor importante es si se trata de un coche nuevo, de segunda mano o km 0. Por lo general los coches nuevos son los que suelen beneficiarse de más descuentos ya que van gravados con IVA, mientras que con los vehículos ya matriculados (como los de ocasión o km 0) por lo general debe abonarse el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales en su lugar, aunque puede haber excepciones. En cualquier caso, pregunta siempre en el concesionario si el vehículo está sujeto o no a IVA, y qué descuento te hacen al comprar un coche con minusvalía, tanto a título propio como impositivo.
Siguiendo los criterios anteriores, las bonificaciones serían tres:
Los beneficios al comprar un coche con minusvalía suelen solicitarse antes de la compra del coche: la exención del Impuesto de Matriculación y el IVA deben tramitarse ante Hacienda antes de tener el coche, o, en su defecto, presentar la solicitud antes de la matriculación, mientras que la exención del Impuesto de Circulación deberás solicitarla en el Ayuntamiento en el que esté matriculado el coche.
En el caso de tener que abonar el IVA en su totalidad, podrás solicitar a la Agencia Tributaria la devolución de la diferencia entre el 21% de IVA abonado y el 4% superreducido presentando una instancia de devolución de ingresos indebidos, firmada por la persona en cuestión y acompañada del documento que acredite la minusvalía.
Para solicitar la exención del Impuesto de Matriculación habla directamente con tu concesionario, ya que suelen ser ellos quienes llevan a cabo este trámite por lo que deberás notificarlo por adelantado.
Al comprar un coche a nombre de una persona con minusvalía se pueden dar dos casos:
En cualquier caso, el titular del vehículo puede ser la propia persona discapacitada así como su cónyuge, pareja de hecho o persona con una relación de parentesco hasta del tercer grado; un tutor o representante legal; o una persona que conviva con el discapacitado y pueda demostrarlo con un certificado de empadronamiento o su domicilio fiscal.
Las ventajas de comprar un coche con minusvalía, además, están sujetas a dos requisitos:
Otro de los beneficios de comprar coche con minusvalía es el estacionamiento en las plazas específicas para personas con discapacidad, y el aparcamiento gratuito en zonas restringidas.
Es importante que sepas que no normalmente solo las personas con movilidad reducida reconocida tienen acceso a la tarjeta de aparcamiento que concede estos beneficios.